Mejor compremos chocolates

En este video, Jorge González me recuerda a mi amigo J.

Y me parece guapo Jorge González en este video, porque a veces tiene la misma sonrisa que mi amigo.

Las mismas ondas en el cabello que caen sobre su frente.

Los movimientos de baile (o performance) con soltura.

La mirada traviesa.

Esa sonrisa del minuto 2:22...

Es desesperantemente guapo.

A veces fantaseo con mi amigo J.

(Ay, no debería escribir esto tan a la ligera)

Cuando veo alguna fotografía nueva de él, a veces (muy pocas veces, eso sí) me pregunto si siempre he estado enamorada de él de manera platónica desde que lo conocí. O mejor dicho, desde que vi su collage en la segunda clase de Forma y Espacio en la universidad, hace 12 años.

Y cuando pienso eso, me da mucho miedo.

Debe ser porque se acerca su cumpleaños, y pronto le escribiré.

Sí, sólo debe ser por eso.

Soy una mujer de 30.

Ya no debería escribir de estas cosas.

Tengo 30 y aún no sé qué hacer con mi vida.

No tengo idea de nada, como dice la letra de esta canción.

En estos momentos, me haría bien comer marihuana. ¿Alguien tiene?

Cadáver emocional

A veces los antidepresivos parecen no funcionar, especialmente en estas madrugadas.

¿Cómo es posible que una sola persona deje tanta destrucción en mí?

Venlafaxina

¿Podemos suspender la venlafaxina, doctor?
Es que las ideas suicidas volvieron, y esta vez es peor que antes.
Cada vez es más insoportable.

No puedo con esta tristeza.
De verdad no puedo.

Ojalá pudiera devolverle en alguna medida el daño que me está haciendo.
¿Estará consciente de eso?
Lo dudo.

Le importo un carajo.

Distante

Te entrego todo de mí, tengo tanto amor para darte.
Y tú sólo me das tu indiferencia y tu frialdad.

No es justo.

Los enamoramientos unidireccionales nunca son justos.

En el amor y en la guerra siempre pierden los más débiles.

Creía que tomando antidepresivos ya no tendría estos ataques de llanto por la madrugada.

En estos momentos me gustaría tener un trocito de galleta de marihuana.

Chocolates

♪ El viento se lleve esta tormenta
que hace tan difícil avanzar.
Yo busco tu rostro entre la gente
como un faro en medio del mar.

Por si estás escrito en mi destino
fui dejando huellas al andar,
para que al final de este camino
nuestras almas se abracen al llegar. ♫

Volví a escuchar "Un amor del bueno" de Laura Canoura, y volví a llorar.
(Bueno, lloro todos los días, así que no hay mucha diferencia)


A veces pienso que es tonto depender tanto de una persona.
Es tonto quitarse la vida por una persona.

Quisiera sentarme en un parque y ponerme a llorar todo el día allí, hasta que él me encuentre deshidratada y se compadezca de mí.
(Risas)

Se me ocurren algunas cosas que quiero hacer antes del "gran día".
De hecho, ya estoy haciendo una: aprovechar de comer golosinas, y sobre todo, chocolates.
"Y comería chocolates hasta reventar", decía en la canción "Mi último día" de Tatiana Bustos.

También me gustaría fumar o comer marihuana, pero por desgracia no tengo los contactos-amigos.


Quiero ir a la playa en un día nublado y caminar en la arena, mojarme las piernas en el mar.
Iba a hacerlo hace algunos meses, pero me arrepentí.
Tal vez lo haga pronto, quién sabe.

El cuerpo no puede

No puedo con esta tristeza.
Mi cuerpo no puede, no tiene fuerzas para seguir con esta angustia.

Pienso todos los días en el dogal de verdugo que me espera en un mueble de mi habitación.

Me haría bien tener un trocito de galleta o brownie de cannabis ahora.
Me reiría de cosas sin sentido.

La cucaracha

Necesito un abrazo.

Ayer se me acabó la galleta cannábica y estoy llorando a mares.

♪ La cucaracha, la cucaracha
ya no puede caminar,
porque le falta,
porque no tiene
marihuana que fumar. ♫


No lloro por falta de droga, hay que aclarar.
Lloro por falta de cariño.

Penúltima porción

Los ataques de llanto no terminan.
Un año entero llorando. Es cansador.
Los impulsos de suicidio son más repentinos, y eso no es bueno.
Recuerdo que el dogal de verdugo está en un cajón, esperándome pacientemente.

Acabo de comer la penúltima porción de galleta cannábica.
Cuando se me acabe la droga, temo que moriré de pena.
Nada funciona.

Refugio

* Cada uno intenta escapar como puede.
* No importa que el método sea inútil.
* Asunto mío si decido refugiarme en las drogas, en una página porno de citas, en la automutilación, o en las fantasías recurrentes de suicidio.

* Tú no estás. No cambiarás de opinión.

Regresaron

* Los pensamientos suicidas regresaron de pronto y con mucha fuerza, invadiéndome casi por completo.
* Incluso pensé lo que escribiría como mini-notas suicidas.

* Como él ya no lee este blog, puedo desahogarme aquí.
* Debo desahogarme aquí como sea necesario para no hacer nada estúpido.

* Estoy cansada de esperar por nada.
* Más de nueve meses llorando casi todos los días, esperando migajas.
* Eso es lo único que obtendré de esa persona; migajas, miserables migajas.

* Estoy cansada.


* La marihuana ayudaría bastante en estas situaciones. Lo malo es que me pongo a comer como cerda. Luego, el efecto pasa y me deprimo más (como ahora).

Galleta cannábica (segunda parte)

* Imagina que estuve a punto de decirte que te amaba.
* Así de drogada estaba.

Galleta cannábica

* Lo mejor de haber estado bajo los efectos de la marihuana fue no sentir la tristeza devastadora de siempre.
* De verdad, no sentí pena en absoluto.

* Sólo por eso, parece que me drogaré más seguido.